Javier Arroyo, CEO y Co-fundador de Smartick

Los últimos datos del informe PIRLS (Progress in International Reading Literacy Study) revelan que la comprensión lectora de los alumnos españoles ha empeorado, hasta en siete puntos (521) desde 2016 (528). Estos datos nos colocan en el puesto 21 del ranking mundial, por debajo de la media europea y bastante lejos del nivel de Singapur (587), Hong Kong (573) o Rusia (567), que lidera la tabla.

La comprensión lectora es una habilidad esencial para el aprendizaje y el desarrollo académico de los escolares. Sin embargo, no todos los niños tienen el mismo nivel o la misma facilidad para entender los textos escritos. Algunos tienen dificultades para extraer la información relevante, hacer deducciones o comprender el significado más profundo de un texto.

Por este motivo, los resultados del informe -que evalúa el rendimiento de los estudiantes de cuarto curso (9 años), de diferentes países, en comprensión lectora- preocupan a la comunidad educativa y están impulsando la necesidad de buscar nuevos caminos para mejorar la comprensión lectora de los más jóvenes.

Cada vez resulta más incuestionable que el futuro de la educación irá ligado a un mayor uso de tecnologías (Inteligencia Artificial, Big Data…), que ya han comenzado a mostrar un interesante potencial en el desarrollo de algunas habilidades como la comprensión lectora.

¿Cómo puede ayudar la Inteligencia Artificial a mejorar la comprensión lectora?

A través de la Inteligencia Artificial (IA) se pueden abordar diferentes enfoques educativos, encaminados a trabajar la comprensión lectora de los estudiantes.

Por un lado, pueden utilizarse los algoritmos para identificar patrones en los datos de los escolares, comprender sus fortalezas y debilidades individuales y, en consecuencia, adaptar las estrategias de enseñanza. Esto proporciona a cada estudiante una atención más personalizada y específica, tratando las áreas en las que requiere un mayor apoyo y ofreciéndole actividades y materiales que se ajusten a sus características particulares.

Dentro de esta misma línea de personalización, resulta muy beneficioso el uso de herramientas “inteligentes”, capaces de recomendar libros y textos en función del nivel y los intereses de cada niño. Así se genera un mayor gusto por la lectura y se promueve el desarrollo de la comprensión lectora.

Una de las funcionalidades más importantes de la IA es su capacidad para analizar grandes cantidades de texto de manera rápida y precisa. Los sistemas de IA pueden procesar textos extensos y seleccionar los datos más importantes, identificar patrones lingüísticos y comprender el contexto en el que se utiliza una determinada palabra o frase. Pueden ofrecer explicaciones y ejemplos adicionales para aclarar conceptos difíciles y contribuir así a un mayor entendimiento de la materia.

Esta tecnología también permite adaptar la dificultad de los textos y las preguntas al nivel de habilidad. Al ajustar la complejidad de los materiales, los sistemas de IA pueden proponer el desafío adecuado para cada estudiante, impidiendo que se aburra si el texto es demasiado fácil o que se frustre si le resulta demasiado difícil.

Y eso es precisamente lo que hace el método Smartick: emplea la Inteligencia Artificial y el Big Data para descubrir a qué ritmo avanzan los estudiantes y, basándose en ello, les diseña un plan de estudios individualizado. El algoritmo se adapta a cada usuario y, partiendo de los datos de cada una de las sesiones (precisión, velocidad, entonación y comprensión) le propone ejercicios que encajan con su perfil y que se mueven siempre en la frontera de su máximo nivel de competencia, asegurándose así  que avanza a su ritmo y fomentando su autoestima.

Además, el propio sistema analiza las respuestas y ofrece un feedback, en tiempo real, para aprender de los errores y poder resolverlos.

Más de 6.500 alumnos de 100 países utilizan ya este método de enseñanza lectora online que ayuda a los niños a leer de forma fluida, comprendiendo lo leído y potenciando su imaginación y creatividad.

Por supuesto, la IA no pretende reemplazar la labor de los docentes, pero puede complementarla. Los profesores siguen siendo fundamentales en el desarrollo de las habilidades de comprensión lectora, al proporcionar orientación, motivación y apoyo emocional. La IA actúa como una herramienta adicional que potencia la labor del profesorado y mejora los resultados educativos.

Pero, aunque la implementación de la IA como herramienta educativa para la comprensión lectora presenta grandes oportunidades, también tiene un serio inconveniente: la posible falta de accesibilidad o de equidad en el uso de la tecnología. Por ello, resulta indispensable poner en marcha de medidas que garanticen el acceso a este tipo de tecnologías por parte de todos los alumnos, no solamente de unos pocos.

Es evidente que la IA se perfila como una herramienta prometedora para mejorar la comprensión lectora de los estudiantes españoles. Su capacidad para analizar grandes volúmenes de texto, proporcionar retroalimentación personalizada y adaptar los recursos educativos puede marcar una diferencia significativa en el desarrollo de las habilidades de comprensión lectora. Al combinar la experiencia de los docentes con el potencial de la IA, podrán obtenerse avances sustanciales en la educación y en el fortalecimiento de las habilidades lectoras.

SOBRE Javier Arroyo Crejo, CEO y fundador de Smartick Graduado por Harvard Business School en el Executive Program (2019). También es licenciado en Economía por la Universidad Autónoma Madrid (España, 1995) y MBA de Solvay Business School (Bélgica, 1999). En Smartick, Javier lidera las áreas de marketing, comunicación, atención al cliente y relaciones externas. Previa a su experiencia en Smartick, Javier ha trabajado como consultor estratégico en Accenture y Marketing (Fast Track Sport Media Consulting). Fue socio fundador de Fast Track, hoy perteneciente al Grupo internacional de comunicación WPP.  En 2018, Javier fue galardonado como “Eisenhower Fellow” por el Congreso de los EEUU para reconocer su trabajo mundial en educación. Javier es también Emprendedor Endeavor. 

Javier Arroyo