Marta Martín, de Ciudadanos, Guillermo Meijón, del PSOE, y Óscar Clavell, del PP fueron los contendientes del debate político que acogió el 46º Congreso de CECE, celebrado en Valencia entre los días 8 y 10 de noviembre.
Fue el broche final de tres días de trabajo salpicados de política, dadas las intenciones del actual Gobierno de hacer una ley educativa que trastoca las condiciones que afectan a la enseñanza concertada. Si sumamos eso a la delicada coyuntura del Gobierno en el Parlamento y a la cercanía de las elecciones municipales y autonómicas, era ineludible plantear un debate entre partidos. La convocatoria también se había extendido a Podemos y a Compromís, pero su sillas quedaron vacías. Óscar Clavell se encargó de afearles el gesto ante los más de congresistas.
Moderaron el debate con eficacia dos periodistas valencianos especializados en educación: Rafael Montaner, del diario Levante, y Ximo Batista, de Las Provincias.
Los tres representantes políticos tuvieron perfiles diferenciados. Reduciéndolos a una característica, Marta Martín fue ‘los datos’ (fue la que manejó más información en sus argumentos). Guillermo Meijón, el aplomo (con cierta superioridad moral defendió los estándares del discurso socialista clásico en educación, sin responder a las preguntas más concretas). Y Óscar Clavell, el discurso más electoralista (fue el más emocional de los tres, atacó al PSOE y circunscribió parte de sus mensajes a la Comunidad Valenciana).
A cada uno de ellos pudo sacársele un titular:
- Marta Martín: «Nos gustaría que la demanda social se extendiera también a la pública».
- Guillermo Meijón: «Los socialistas somos los padres de la concertada».
- Óscar Clavell: «La ministra quiere quitar la demanda social para cuando los gobiernos autonómicos retiren conciertos, los tribunales lo avalen».
Tanto la representante de Ciudadanos como el del PP, coincidieron en que la reforma anunciada por la ministra Isabel Celaá supone un «ataque frontal» a la enseñanza concertada porque revertirá el sentido de las sentencias judiciales si una administración autonómica decide retirar o no renovar conciertos. Es decir, ocurrirá lo contrario de lo que ahora dicen varias sentencias del TSJ de la Comunidad Valenciana.
El representante del PSOE negó que la futura ley sea una amenaza para la concertada, incluso ridiculizando los temores a que así sea, y se amparó en el argumento de que hay mucha concertada en España, como si lo que se discutiera fuera una cuestión de cantidad y no de derechos.
Clavell hizo incapié en que cuando un colegio se construye en suelo público, no se está regalando, sino cediendo, y Martín argumentó que, si para los socialistas el problema es el uso del suelo público, que se modifique la regulación del mismo, pero que no se quite el reconocimiento de la demanda social de los colegios.
Infantil 0-3
En el debate también se planteó a los políticos cómo pensaban dar respuesta al reto de la universalización de la etapa 0-3 de Infantil, que todos han hecho suyo de cara a las próximas elecciones. Cabe recordar que el 0-3 es una etapa en la que el alumnado actual está repartido a partes iguales entre escuelas públicas y privadas, que apenas hay conciertos y que el PSOE, de momento, ha propuesto sólo crear plazas públicas. En esta información te contamos, en detalle, cómo está organizado el 0-3 en España.
El PP defendió cubrir hasta el 80% con el bono infantil para que los padres puedan elegir escuela.
Ciudadanos puso el acento en que hay un problema de desigualdad territorial que requiere una planificación política nacional.
El PSOE defendió el programa de cooperación territorial planteado por el Ministerio para dar ayudas al 30% de las familias más desfavorecidas.