La tecnología no sólo le ha servido al Colegio Montesol de Vigo para mantener la actividad académica de los alumnos y una rutina de tareas escolares, sino para impulsar la creatividad y, sobre todo, conectar emociones. El montaje de vídeo que han lanzado por sus redes, y en el que se ve a los docentes lanzándose rollos de papel higiénico con mensajes de ánimo escritos en ellos, ha conseguido más cariño de los alumnos y de las familias que cualquier carta de ánimo, que también las hay con frecuencia, y que la conexión diaria para encargar y corregir tareas.
Os profes de ESO tamén teñen unha mensaxe para vós!!!
Publicada por Colexio Montesol en Lunes, 23 de marzo de 2020
Iniciativas así nos recuerdan que un colegio es una comunidad de emociones y valores. Este vídeo hace sentir a sus alumnos y sus familias que su ‘cole’ está ahí, apoyando a todos sus miembros en la dura cuarentena e intentando mantener el ánimo arriba.
El director del Montesol, Javier Ojea, no para de recibir agradecimientos emocionados de las familias del colegio y hasta de los ex alumnos, que transmiten su nostalgia por su antiguo ‘cole’. «Gracias por estar ahí», manifiestan madres y padres.
El Montesol es un centro concertado que imparte Infantil, Primaria y ESO. Esa necesidad de mantener la conexión emocional con el centro surgió primero entre las maestras de Infantil, que se hicieron fotos dando ánimo a sus pequeños alumnos y las subieron a las redes sociales del colegio y a la plataforma Esemtia (Edebé), que es la que utiliza el profesorado y la dirección del centro para comunicarse con las familias.
Eso le hizo pensar a una profesora de ESO cómo podría conectar emocionalmente con los alumnos mayores, los de Secundaria. Y se le ocurrió el montaje de vídeo que está cosechando tanto agradecimiento. En clave de humor, cada profesor, en su casa, envía un mensaje escrito en un rollo de papel higiénico y el montaje de todos ellos acaba emocionando a cualquiera, tenga o no tenga que ver con el Montesol. La banda sonora que acompaña a las imágenes, Under Pressure, no puede ser más oportuna.
Salvados por Google Classroom
Javier Ojea nos sorprendió con este vídeo cuando contactamos con él para que nos contara cómo estaban organizando en su centro la actividad escolar online durante la cuarentena.
El profesorado emplea la plataforma Esemtia de Edebe para comunicarse diariamente con las familias, enviar las tareas y recomendar enlaces a vídeos y otros contenidos. Los alumnos de ESO, más autónomos que los de Primaria, trabajan más concienzudamente e interactúan más con el profesorado a diario a través de Google Classrom, donde cada docente fija las tareas y hace un seguimiento de quién las ha hecho y quién las ha entregado, y el alumno puede ver las correcciones de su profesor. También se transmiten dudas y explicaciones.
Justo pillamos a Javier conectado a Google Classroom haciendo el seguimiento de su asignatura, Economía. Si bien el colegio empezó a trabajar con la suit de Google hace cinco años, ya ha sido este curso cuando se ha impuesto como obligatoria para trabajar de manera cotidiana en clase. Javier y otros docentes hacen incluso los exámenes a través de la aplicación.
Gracias a ese camino recorrido, la organización de la actividad escolar desde casa ha sido fácil desde el primer día de aislamiento. «No quiero imaginar cómo estaríamos de nerviosos todos si no domináramos ya esta herramienta y esta manera de trabajar», dice el director.
«Las familias nos muestran su agradecimiento y satisfacción por cómo estamos trabajando», cuenta el director. «Hasta las familias más escépticas con la organización digital del trabajo escolar en los últimos meses ahora están diciendo ‘menos mal’ que tenemos esto y ya sabemos manejarlo».
Pese a eso, Javier reconoce que «vamos aprendiendo sobre la marcha de esta situación inédita». Al principio organizaron el encargo de tareas de una manera, más pegada al horario escolar presencial, y ahora, aunque la conexión es diaria, no está tan estructurada por horas o sesiones porque «no podíamos exigir a las familias esa responsabilidad».
Además de la comunicación puramente académica, el director del Montesol destaca la importancia de mantener una actividad en las redes sociales del colegio. Gracias a ellas, se mantiene la cohesión del conjunto y la empatía y se refuerza la idea de que todos estamos en el mismo barco.